El condicionamiento clásico fue demostrado por primera vez a manos del psicólogo Ivan Pavlov y puede resumirse con una de las ideas más claras del filósofo griego Aristóteles, que cita: "Cuando dos cosas suelen ocurrir juntas, la aparición de una traerá la otra a la mente".
Esta idea recoge el pensamiento básico de Estímulo-Respuesta, fue probado científicamente con animales pero está más que claro que responde a gran parte de la actitud de muchos seres humanos, no somos tan distintos.
Cuando estás acostumbrado a comer todos los días a las 14.30, y un día se te saca de la rutina a esa hora seguramente empezarán a sonarte las tripas, para la hora de ir a dormir, lo mismo, pero es en el comportamiento con otros seres humanos y como nos condicionamos unos a otros; No es que esa persona sea cuidadoso desde siempre al empezar una relación con otra, es que seguramente le habrán dado muchos palos y andará con pies de plomo. Es incomprensible como hay gente que se pregunta el por qué de algunas actitudes, cuando la mayoría de las veces está claro que han sido desarrolladas por la reiteración de un estímulo, una acción que a veces aunque no haya sucedido aun, genera esa respuesta automáticamente a modo de predicción.
Y es que no somos tan diferentes de los animales irracionales, nosotros tenemos el defecto de que nos volvemos a equivocar una y otra vez, intentamos negar a nuestras cabezas que va a volver a suceder y escuece mucho pero repetimos hasta el dolor y es entonces cuando ponemos barreras, nos ocultamos o mostramos una falsa valentía y aunque sea perfectamente irse por las ramas del asunto, impide conocer a una persona de verdad. Asco de hipocresía
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